sábado, 18 de octubre de 2008

Paulo Coelho - Once Minutos




Paulo Coelho nació en una pequeña familia de clase media y de fuerte influencia católica, en Río de Janeiro, donde estudió en un colegio jesuita. Contrastando con la fuerte disciplina que se le impuso, se tornó rebelde y, a los diecisiete años, fue internado tres veces en una clínica psiquiátrica.
A finales de la década de 1960, se une al movimiento hippie, abandonando los estudios en 1970 para realizar un viaje por Perú, Bolivia, Chile y México, así como por Europa y el norte de África. Dos años más tarde regresó a Brasil y comenzó a componer letras para canciones, trabajando junto a Raul Seixas. En 1974 y durante un breve periodo de tiempo estuvo detenido en un centro militar de torturas acusado de actividades subversivas contra el gobierno brasileño. En 1987, recorrió el Camino de Santiago entre Francia y España, lo que inspiró su primer libro de éxitos, "El Peregrino de Compostela".
Como escritor, ha ocupado frecuentemente las primeras posiciones en las clasificaciones de los libros más vendidos en países. Ha vendido más de 100 millones de libros,con traducciones a más de 66 idiomas, siendo el autor más vendido en lengua portuguesa de todos los tiempos, sobrepasando incluso a Jorge Amado.

La novela de Coelho, una reflexión sobre la naturaleza del amor y el sexo.

Sinopsis: María es de un pueblo al norte de Brasil. Todavía adolescente, viaja a Río de Janeiro, dónde conoce a un empresario que le ofrece un buen trabajo en Ginebra. Allí, María sueña con encontrar fama y fortuna pero acabará ejerciendo la prostitución. El aprendizaje que extraerá de sus duras experiencias modificará para siempre su actitud ante sí misma y ante la vida. Once minutos es una novela que explora la naturaleza del sexo y del amor, la intensa y difícil relación entre cuerpo y alma, y cómo alcanzar la perfecta unión entre ambas. Once minutos ofrece al lector una experiencia inigualable de lectura y reflexión.

Coelho dice que no ha querido escribir "un libro teórico sobre el sexo, sino describir las emociones y los sentimientos que se apoderan de los personajes cuando el amor nace en sus corazones".
Y en Once minutos queda flotando la idea de que, más allá de la individualidad del emprendimiento, lo importante es la convicción de seguir tu propia voz.
Pero “Once minutos” no es solamente lectura. A lo largo del libro se descubre y se aprende a reflexionar sobre la sexualidad inserta en la misma historia; esa palabra que, en palabras del autor, significa “tener el coraje de vivir las propias paradojas, la propia individualidad y la propia voluntad de entrega”.

Esta es María a inicios del relato:


“Aunque mi objetivo sea comprender el amor, y aunque sufra por culpa de las personas a las que entregue mi corazón, veo que aquellas que tocaron mi alma no consiguieron despertar mi cuerpo, y aquellos que no tocaron mi cuerpo no consiguieron llegar a mi alma.”

Y esta es María a finales de la novela:


“Y me fui, con él. Y no fueron once minutos, sino una eternidad, era como si los dos hubiésemos salido del cuerpo y caminásemos, en profunda alegría, comprensión y amistad por los jardines del paraíso. Yo era una mujer y hombre. El era hombre y mujer. No se cuanto tiempo duro, pero todo parecía estar en silencio, en oración, como si el universo y la vida hubiesen dejado de existir, y se hubiesen transformado en algo sagrado, sin nombre, sin tiempo.”

Once minutos tiene los mismos defectos y las mismas cualidades que hicieron que los libros de Paulo Coelho sean detestados por los críticos y devorados por los lectores".





3 comentarios:

Radio Tutus dijo...

Eres una come-libros so fea.

Radio Tutus dijo...

Gracias so wapo, eso es un piropazo losepas.
Como diría Richard Steele: "La lectura es a la inteligencia, lo que el ejercicio es al cuerpo."

Un beso, jeje.

Radio Tutus dijo...

Eso es un golpe bajo, lo sepas rision.